Jardín: espacio y transición entre la arquitectura y el paisaje circundante

“Dios omnipotente, antes de todo, hizo primero un jardín. Y de verdad, este es el más puros de todos los placeres del hombre” escribió Francis Bacon en 1625. Los consideró el mayor refresco del espíritu humano, y según su apreciación, los jardines se vuelven imprescindibles para enaltecer las construcciones, edificios y hasta palacios con los que conviven.

 

¿Qué desafíos presentaba este proyecto de jardín? Altas expectativas con varias dicotomías aparentes: reducidos metros cuadrados disponibles con deseos de vivir intensamente el exterior… pronunciado desnivel entre el interior de la casa y la laguna, con un nítido interés en vincularlos… una arquitectura contemporánea, con carácter y el agua como límite o, como posibilidad de expansión…

¿Cómo lo abordamos? Definimos algunas premisas en conjunto con los propietarios y el arquitecto proyectista de la casa: sumar en lugar de competir, intensificar la fluidez interior- exterior y optimizar al máximo el espacio y su uso.

Como proyectista del paisajismo, el objetivo primordial o gol (ya que estamos en temporada mundialista), consistiría en lograr espacios prácticos, funcionales y placenteros, en este lindísimo y complejo entorno.

Determinante para el vínculo entre vivienda y agua, resultaba el “hardscape” (elocuente en su idioma original) en este proyecto, que para nosotros equivaldría a la estructura o toda la parte dura del jardín, decisiva aquí para resolver la comunicación entre ambos niveles, más las contenciones necesarias para conservar en su lugar importantes volúmenes de tierra plana.

Proyectamos entonces, espacios para estar: galerías, superficies de césped, muelle y, espacios para circular: escaleras y rampas y nos propusimos que las dos últimas resultaran protagonistas, tuvieran un recorrido extendido, pausado, con interés en ese transitar. Elegimos continuidad de materiales y colores en el tramo más elevado, y en cambio expresarnos con un lenguaje de la tierra en el resto, a través de durmientes y césped en su construcción. Optamos por soltura y exuberancia en la plantación, difuminando límites y ablandando materiales duros como el hormigón y el quebracho.

Propongo algunas preguntas para evaluar este u otros resultados:

¿tiene el jardín un planteo definido?

¿hay comunicación entre los diferentes espacios con claridad de circulación?

¿invita el jardín a permanecer en él, disfrutándolo y/o simplemente mirándolo…?

Para desafiarnos a nosotros mismos y poner bien alta la vara, recurro aquí a las palabras de Zaha Hadid (arquitecta emblemática reciente y entre nosotros hasta el 2016): “no considero a los espacios diseñados como meramente refugio, deberían excitarnos, calmarnos e incluso, hacernos reflexionar”.

 

Fotos de vivienda unifamiliar en Lagos del Golf, Nordelta.

Paisajismo: proyecto, ejecución y fotos: Oda al Verde.

Arquitectura: proyecto y ejecución: Juan Trivelloni